viernes, 31 de marzo de 2017

Jorge Isaacs

(Cali, 1837 - Ibagué, 1895) Escritor colombiano. Realizó sus estudios de primaria en la escuela de Cali y en Popayán y los continuó en la capital de la República entre 1848 y 1852.
Regresó a Cali sin terminar el bachillerato, debido a la difícil situación económica de su familia, lo que le hizo olvidar su sueño de ir a estudiar medicina a Inglaterra. Participó en 1854 en las campañas del Cauca, contra la dictadura del general José María Melo. Dos años después contrajo matrimonio con Felisa González Umaña. En 1860, volvió a tomar las armas y participó en defensa del gobierno conservador de Mariano Ospina Rodríguez, contra el general Tomás Cipriano de Mosquera.
Un año después, fue nombrado subinspector de los trabajos que se realizaban en la construcción del camino de Cali a Buenaventura. Durante este año de labores en el campamento de La Víbora, en el clima adverso de las malsanas selvas del Dagua, aprovechando el descanso y las horas nocturnas, inició la redacción de su obra cumbre María. Allí contrajo paludismo, enfermedad que lo llevaría a una muerte prematura.
Renunció al cargo y regresó a Cali a terminar la redacción de la obra. El 16 de marzo de 1861 murió su padre, suceso que le obligó a dejar a un lado su afición por la anatomía, la botánica y la medicina y a dedicarse a salvar de la ruina las haciendas y negocios de su padre. No logró cancelar las deudas, motivo por el cual le entregó todos los negocios a su hermano Alcides.
De vuelta a Bogotá, se encuentra en 1864 instalado en la capital de la República como comerciante en un almacén donde vendía telas, herramientas y cristalería importada que anunciaba en los avisos de los periódicos. Por iniciativa de su amigo José María Vergara y Vergara, publicó su primer libro de Poesías (1864) e hizo su aparición literaria por mediación del grupo El Mosaico, donde Isaacs empezó a dar a conocer algunos de sus escritos. Representó al Tolima en el Congreso de 1868 y 1869. Fue conservador y en 1869 se convirtió al partido radical. Esta conversión no le fue perdonada por muchos de sus antiguos copartidarios y le causó burlas y rencores hasta el final de su vida. Fue nombrado Secretario de Gobierno del Cauca y simultáneamente Secretario de Hacienda (1870).
En 1871-1872 representó a los Estados Unidos de Colombia como cónsul general en Chile. En 1873 regresó nuevamente a Colombia y se dedicó a organizar la educación en Cali. Se preocupó por la calidad de la enseñanza en todos sus aspectos, tanto en preparación y capacitación de los maestros, como en dotación de los centros educativos. Promovió la educación de la mujer, procuró la creación de escuelas nocturnas, agrícolas y de oficios. Seguidamente, ocupó el cargo de superintendente general de Instrucción Pública Primaria en el Estado del Cauca (1875) y en el de Tolima (1883-1884).
En enero de 1880 se proclamó como Jefe Civil y Militar de Antioquia, pero como no encontró apoyo del gobierno central ni de su partido, tuvo que rendirse. Por tal motivo fue expulsado de la Cámara. Después de su fracaso como político en el intento revolucionario antioqueño, se estableció con su familia en Ibagué y abandonó la política. Rafael Núñez lo nombró secretario de la Comisión Científica en 1881 y comenzó su vida de explorador. Realizó su primer viaje desde Santafé de Bogotá hacia el estado del Magdalena, exploró la región occidental, los desiertos de Aracataca -donde descubrió yacimientos carboníferos-, visitó la Sierra Nevada y la Guajira.
Después de una pausa, reanudó sus exploraciones por la región meridional de Cundinamarca, donde descubrió cavernas con restos humanos muy antiguos. En noviembre de 1886 recorrió la zona de Sevilla, Aracataca, Fundación, Montería, Ronda y Masuga. Aquí también descubrió yacimientos de hulla, petróleo y fosfato de cal. Pasó sus últimos años en Ibagué con su familia, donde murió.
Su obra literaria
En mayo de 1867 apareció en Bogotá su obra cumbre, María, novela que alcanzó un éxito inmediato, hasta el punto de alcanzar más de veinte ediciones a lo largo del siglo XIX. Los críticos literarios la han reconocido como la mejor novela romántica de América Latina, y le ha merecido a su autor el lugar que en la historia literaria corresponde a los clásicos universales.
OBRAS:
- La María.
- Saulo.
- A Cali.
- La casa paterna.
- A Elvira silva.